Obtener la nacionalidad de tus antepasados te permite volver a raíces de tu origen, conocer y honrar la historia de tu familia y entender de donde vienes. Desde un punto de vista práctico, Polonia es miembro de la Unión Europea desde el año 2004 y al tener la ciudadanía polaca te convertirás al mismo tiempo en ciudadano de la Unión Europea. Podrás trabajar y estudiar libremente en todos los países miembros, como España, Francia Italia, Alemania o Polonia, entre otros.
Además, el pasaporte de un país miembro de la Unión Europea es uno de los documentos de viaje más «fuerte» que existe en el mundo. Podrás viajar libremente no sólo entre los países miembros de la Comunidad Europea, sino que también a la mayoría de los países del mundo sin solicitar engorrosas y caras visas. El mundo se te abrirá ofreciendo nuevas y fascinantes oportunidades de desarrollo profesional y personal.